Gracias a la Alhambra, el castillo rojo de los reyes nazaríes, Granada es una de las ciudades españolas más conocidas en el mundo. Está situada entre la llanura y las colinas de la Alhambra y el Albaicín, a los pies de las cumbres siempre blancas de Sierra Nevada. En Granada se reúnen magníficos monumentos, especialmente los que pertenecen a época musulmana, casas y palacios señoriales y la atmósfera de sus barrios más pintorescos.
La provincia de Granada, en una superficie de 12.500 km2, lo tiene todo. 50 km es la distancia que separa los cultivos tropicales de la costa y las playas en las que la gente se dora lentamente al sol, del Mulhacén, en Sierra Nevada, el pico más alto de la Península Ibérica, con sus 3.478 m. Entre el Mulhacén y el mar, se extienden las Alpujarras.
Desde el aeropuerto, a 15 km de Granada por la A 92, podéis llegar a la ciudad en autobús o taxi. Las estaciones de tren y autobuses se encuentran próximas al centro. Si accedéis por carretera, las principales vías son la A 44 y A 4 (Madrid), A 92 (Sevilla y Málaga), A 92 y A 7 (Levante).
El mejor medio para desplazarse por Granada es el transporte público, pues en el centro existen fuertes restricciones al tráfico. Varias líneas de autobuses urbanos recorren la ciudad; las líneas 30 y 32, que salen de la Plaza Nueva, llevan a la Alhambra y al Albaicín. Las paradas de taxi se reparten por todo el casco urbano. Otras opciones para recorrer la capital son el tren turístico, las bicicletas, motos y segways de alquiler.
En Granada, la oferta hotelera es casi infinita, ya que además de ciudad turística es sede universitaria. Dormir en el mismo recinto de La Alhambra, en el Parador, no es asequible para muchos, pero en la ciudad hay buenos hoteles y hostales con una estupenda relación calidad-precio. A la temporada alta veraniega en las playas hay que sumar la temporada de esquí en Sierra Nevada.
Esta Guía Total de Granada contiene la mejor información sobre la ciudad de Granada y su provincia totalmente actualizada. En el primer capítulo de esta guía se describen cuatro Itinerarios por Granada, para recorrer los barrios y conocer los monumentos más característicos e interesantes de la ciudad: el Albayzín, la Alhambra, la ciudad cristiana...
La Alhambra es el monumento más visitado de España y el palacio más hermoso y mejor conservado de los que dejó el arte hispano-musulmán. Fue declarado Patrimonio Mundial por la Unesco junto con el Generalife y el Albaicín.
Lindando con la Alhambra, con la que se comunica, este palacio construido como residencia veraniega de los monarcas nazaríes a principios del siglo XIV, cuenta con una bellísima combinación de jardines, fuentes, albercas y surtidores.
Frente a la Alhambra, en una colina, se extiende el barrio del Albaicín, un bello laberinto de estrechas callejuelas empedradas, de placitas, de cármenes (casas con jardín) y de pintorescos rincones que encierran buena parte de la personalidad de Granada.
Las míticas Alpujarras, último refugio morisco, es una comarca de increíble tipismo y encanto y uno de los puntos más atractivos de la provincia granadina. La visita es inexcusable a pueblos como Capileira, Pampaneira, Bubión o Trevélez, la localidad más alta de la Península.
En el Parque Nacional de Sierra Nevada se encuentran las mayores cotas de la Península: los picos Mulhacén y Veleta. Sus peculiares fauna y flora añaden mayor atractivo al gran espectáculo de sus paisajes y al reclamo de su estación de esquí.
Apenas 50 km rumbo al sur se alcanza la costa, pero no una costa cualquiera, sino el puro trópico cálido y dorado, tierra que produce caña de azúcar, chirimoyas, mangos, aguacates... y donde existen playas y ensenadas entre soberbios acantilados.
Si os fascinó durante el día, no dejéis de conocerla por la noche, cuando el interior de los Palacios Nazaríes se adorna con una sugerente iluminación.
El barrio gitano por antonomasia de Granada, en cuyas cuevas tiene lugar la Zambra, espectáculo flamenco de gran originalidad.
En la Alcaicería, antiguo zoco árabe, junto a la plaza de Bib-Rambla, encontraréis un rosario de tiendas con artesanía granadina: la cerámica fajalauza, la taracea (objetos de madera con incrustaciones de marfil, nácar…) y la plata son lo más frecuente.
Los bares, con sus generosas tapas servidas gratis con la bebida, se reparten por toda la ciudad, aunque es en los barrios históricos y en el centro donde se sitúan los más afamados y concurridos.
Granada, marcada por la cercanía de la vega, la montaña y el mar, tiene una rica y variada gastronomía. Las habas con jamón es el plato más tradicional. La tortilla del Sacromonte -que para ser auténtica ha de llevar criadillas y sesos de cordero- está vinculada al tradicional recetario granadino. Además, los pescados de Motril, fritos o a la plancha, el gazpacho, el remojón con bacalao y naranjas, la pipirrana o guisos como la olla de San Antón o el potaje gitano, sin olvidarse de las papas a lo pobre, hacen que comer en Granada sea una bendición para los paladares más exigentes.
En junio y julio se reúne en Granada lo más interesante de la música y el ballet en el panorama internacional con motivo del Festival Internacional de Música y Danza. En mayo se celebra el Festival Internacional de Poesía, en primavera el Festival Internacional de Tango y durante el otoño, el Festival Internacional de Jazz. Fiestas renombradas son la Semana Santa, con sus procesiones, y la Fiesta de la Cruz (en mayo), con plazas adornadas con cruces florales. Pero la fiesta de mayor solemnidad es el Corpus, en junio, a continuación de la cual tiene lugar la Feria.